El salto de Acomat es una cascada accesible por un camino muy accidentado, y luego por un sendero no señalizado pero que no presenta demasiada dificultad. El baño y el famoso salto en la poza están permitidos, pero bajo su propio riesgo.
Es un lugar privilegiado y acogedor para los guadalupeños, que a menudo vienen en familia para almorzar a la sombra del bosque tropical durante los fines de semana.
Atención
El sitio está potencialmente sujeto al riesgo de crecidas repentinas que pueden ocurrir después de tormentas y fuertes lluvias río arriba. Se han reportado ahogamientos. Tenga cuidado con los remolinos y torbellinos de la cascada, así como con los bordes de la poza, que están formados por rocas resbaladizas que pueden provocar caídas, a veces mortales.